YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales) fue fundada en 1922 como la primera empresa petrolera estatal integrada verticalmente en el mundo, marcando un hito en la historia energética de Argentina. Su creación, impulsada por el general Enrique Mosconi, respondió a la necesidad estratégica de asegurar la soberanía energética del país en una época donde las compañías extranjeras dominaban el mercado. Durante décadas, YPF ha sido un símbolo de desarrollo industrial y tecnológico argentino.
En los años 90, como parte de una ola de privatizaciones, YPF pasó a manos privadas, siendo adquirida principalmente por Repsol. Sin embargo, en 2012, el gobierno argentino decidió recuperar el control de la compañía, expropiando el 51% de las acciones que estaban en manos de Repsol, retomando así el control estratégico de los recursos energéticos nacionales. Este proceso significó un nuevo capítulo en la historia de la empresa, que volvió a posicionarse como un actor clave en el desarrollo energético argentino.
Actualmente, YPF cuenta con la red más extensa de estaciones de servicio en Argentina, con más de 1,500 puntos de venta distribuidos estratégicamente en todo el territorio nacional. Esta capilaridad le permite a YPF mantener una presencia significativa tanto en grandes centros urbanos como en pequeñas localidades y rutas nacionales, garantizando el suministro de combustibles y servicios complementarios a millones de argentinos diariamente.
